Este artículo explora los problemas de gobernanza en el tema de la energía nuclear en Taiwán, especialmente el éxito y fracaso de las plantas nucleares tres y cuatro. El éxito de la planta nuclear tres durante el período de autoritarismo destaca la insuficiencia del "software" social, mientras que la planta nuclear cuatro no pudo operar debido a fallas en la gobernanza. El problema de la disposición de residuos nucleares resalta la incapacidad de gobernanza y profundiza la crisis de confianza en la sociedad. La alienación del referéndum refleja la ineficacia del sistema de gobernanza, que no logró promover un consenso social, sino que, por el contrario, intensificó la confrontación.